La Inspección de Trabajo obliga a Burger King a permitir que sus trabajadores lleven barba

Encontrarse un pelo en la comida es una de las peores experiencias cuando se va a un restaurante. Por ello la multinacional de comida rápida Burger King obligaba a sus trabajadores a afeitarse barba, bigote y patillas. Pero esta norma está cerca de llegar a su fin: la Inspección del Trabajo ha dado la razón al sindicato Comisiones Obreras y ha obligado a la empresa a permitir que sus trabajadores lleven barba.

En la denuncia, el sindicato expuso que la obligación del afeitado en los hombres y de llevar un lazo en el pelo para las mujeres vulneraba los derechos de imagen e intimidad de los trabajadores. Ahora Inspección de Trabajo ha concluido, tal y como argumentaba el sindicato, que las obligaciones de vestimenta e imagen de la empresa –a los hombres se les obliga a llevar corbata– conculcan los derechos de los trabajadores y no están justificados, por lo que son contrarios al principio de no discriminación por razones de sexo.

De acuerdo con el sindicato, la multinacional de comida rápida obliga a sus trabajadores hombres a afeitarse las barbas, bigotes y perillas por razones higiénicas. Desde CCOO y la Inspección de Trabajo han concluido que existen otras vías para asegurar la higiene alimenticia, como el uso de barbilleros, que consideran “más moderados y no lesivos de derechos fundamentales”.

Comisiones Obreras también denunció la normativa de vestimenta de Burger King, que exige a los hombres llevar corbata y a las mujeres lazo. No existe la posibilidad que las mujeres puedan vestir con corbata o que los hombres lleven lazo. Según la Inspección de Trabajo, esta diferenciación es contraria al principio de no discriminación por razón de sexo.

En un comunicado, el sindicato ha explicado que se había puesto en contacto con la multinacional en múltiples ocasiones para debatir estas cuestiones, pero ante la negativa de Burger King a hablar, CCOO interpuso la denuncia ante la Inspección. Comisiones Obreras ha valorado “muy positivamente” la resolución de Inspección del Trabajo, y ha considerado que las argumentaciones presentadas son extrapolables a otros casos de discriminación presentes en el sector de la hostelería.