Un hincha del Real Madrid mata a otro del Barcelona

La tragedia se produjo alrededor de las once de la noche, cuando el hincha del Real Madrid, que creía que el Barcelona había perdido ante el Leeds, salió a la calle del pequeño pueblo albaceteño a tirar cohetes para celebrar la supuesta derrota azulgrana. Ambos se encontraban a las puertas de sus viviendas, a una distancia de sólo cincuenta metros. «Matadme a mí» El seguidor madridista discutió entonces con el dueño de la panadería de Villar de Chinchilla (Francisco Javier Jiménez), entró después en su domicilio y regresó con una escopeta con la que pegó un tiro al panadero, causándole la muerte en el acto. Tras la agresión, el presunto asesino se dirigió hasta el bar Los Manzanos, a dos kilómetros de la localidad, donde confesó el acto y se entregó voluntariamente a la Guardia Civil. «He matado a uno. Matadme a mí», dijo al entrar en el bar el hincha del Madrid, que había protagonizado diversos incidentes anteriormente y ya se encuentra a disposición judicial. El alcalde pedáneo de Villar de Chinchilla, Andrés Jiménez, señaló que el presunto autor del homicidio era una persona «polémica», que «no necesitaba beber» para verse inmerso en más de una refriega. La madre de la víctima, tras pedir justicia por la muerte de su único hijo, aseguró que el detenido estaba «siempre lanzando indirectas» al fallecido.